La Bella y la Bestia (2017): El Clásico se vuelve realidad

La adaptación a la realidad de la bonita historia de La Bella y la Bestia llega a nuestros cines, y debo decir que independientemente de la polémica que se ha formado alrededor de la protagonista de la cinta, Emma Watson y sus recientes declaraciones y su forma de ver a su personaje, la nueva película, dirigida por Bill Condon, funciona. Transmite esa magia que buscábamos cuando veíamos el clásico de animación Disney.

Además de eso, aunque la interpretación de Watson no es la más inspirada del mundo, nos ofrece una visión un poco mas independiente de la princesa, mostrándonos  a una joven audaz y con más iniciativa, cosa que deriva al hecho de que en muchas ocasiones nuestra Bella tome la rienda de algunas escenas en las cuales comparandolas con el clásico, se queda atrás como la típica mujer florero.

Llegados a este punto, tengo que decir que he tenido un conflicto de impresiones, es decir, me parece bien la iniciativa que le han dado al personaje de Bella, pero por otra parte creo que forma parte de un estudio exhaustivo de la población actual. Me explico, las niñas que veían el clásico, ahora son mujeres, mujeres que, en los tiempos que corren, quieren ver plasmada en la pantalla a una mujer fuerte que no se deja llevar por las convenciones ni por ningún hombre, creo que a este hecho le han sacado bastante partido.

En parte me parece bien, porque ya va siendo hora de hacer avanzar las historias de siempre a un terreno más acorde con nuestra sociedad, pero por otra parte me parece un cambio de aires muy interesado calculado: los derechos por la igualdad, la revolución feminista, etc. Con esto no quiero decir que no esté de acuerdo con estos acontecimientos, solo que me molesta un poco que nos metan el mensaje con calzador, en una película que debería ser solo para entretener.

A pesar de ese detalle, que tampoco influye en la película y que es una reflexión personal, la película tiene la magia justa para funcionar, y el gran elenco que la forma, sobre todo en los pequeños papeles, le da una calidad estupenda al film. Remarcaría sobre todo, el papel de la Bestia, interpretada por Dan Stevens y su antagonista Gastón, Luke Evans en su defecto, actores que han sabido sacar lo mejor del personaje que interpretan.

Es verdad que he dicho que la interpretación de Watson no es la más inspirada de su filmografía, pero creo que hay muchos otros factores de los cuales seguro disfrutareis al ver la película. Hay escenas reproducidas al milímetro, con las que disfrutaréis como niños, y otras escenas nuevas que ahondan más en la historia de los dos protagonistas, en su pasado, en sus sentimientos, que también agradeceréis, ya que no desentonan en la película y te hacen sumergirte muy bien en ella. La recomiendo para pasar un buen rato lleno de nostalgia pero también de júbilo.

Anotación del escritor – Acabando de ver la película en versión doblada al español, tengo que decir que pierde mucho en comparación con la versión original. Por alguna razón, las canciones están interpretadas con un tempo más lento que en el clásico de Disney, y por decirlo de alguna manera no se nota fluido y no es agradable para el fan que se sepa las canciones clásicas.

Vista en pase de prensa en CINESA DIAGONAL 3D, el viernes 10 de marzo. Distribuida por Walt Disney Studio Motion Picture Spain.

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