Piratas del Caribe: La Venganza de Salazar (2017): La redención de los piratas

El Capitán Jack Sparrow, el anti-héroe por antonomasia, regresa en esta nueva película titulada “Piratas del Caribe: La Venganza de Salazar”. En esta frenética aventura encontramos a un Capitán Jack de capa caída y con el viento en contra. Además, le persigue un viejo enemigo, el aterrador Capitán Salazar (Javier Bardem) y su tripulación de piratas malditos que han escapado del Triángulo del Diablo y están empeñados en matar a todos los piratas que se les cruzen, especialmente a Jack. Su única esperanza es conseguir el legendario Tridente de Poseidón, pero para encontrarlo deberá forjar una complicada alianza con Carina Smyth (Kaya Scodelario), una hermosa y brillante astrónoma, y con el testarudo Henry (Brenton Thwaites), un joven marinero de la Marina Real británica. Al timón del Dying Gull, un barco pequeño que a duras penas se mantiene a flote, el Capitán Jack busca no sólo acabar con su racha de mala suerte, sino salvar el pellejo del enemigo más malvado y mortífero al que se haya enfrentado jamás.

La película, esta vez dirigida por Joachim Rønning y Espen Sandberg, nos transporta al buen ambiente que consiguió la primera trilogía de películas, siguiendo la misma trama, nos deleita con el reparto original que robó nuestros corazones, y además añade más historia a este reparto, con dos personajes muy vinculados a él, Henry y Carina, dos jóvenes llenos de energía, interpretados por Breton Twaites y Kaya Scodelario, que en mi opinión funcionan genial en la historia y que con suerte esperemos que nos regalen muchas más aventuras en las próximas entregas.

Un guión repleto de sorpresas y algún que otro giro inesperado que logra sorprender al espectador, es la clave para que esta película haya funcionado tanto como sus predecesoras (sin contar la espeluznante cuarta entrega). Creo que «Piratas del Caribe: La Venganza de Salazar», cumple lo que promete, y por mucho que la crítica diga que esta llena de tópicos, nos garantiza dos horas de diversión y entretenimiento, que ya es mucho pedir tratándose de la quinta entrega de una saga tan explotada como ésta. De todas formas, a parte de diversión y entretenimiento, oteamos en el horizonte de la cinta la clara finalidad de atar los cabos sueltos que dejaron las anteriores entregas, un objetivo que fue rotundamente olvidado por la cuarta entrega, creando una historia simple para finalizar otra más complicada.

Por otra parte, esta esperada entrega nos presenta un villano poco común, un villano sediento de sangre y venganza sin un atisbo de luz ni humanidad, algo muy distinto a lo que nos tenían acostumbrados tanto con Héctor Barbossa como con Davy Jones. El Capitán Salazar me pareció algo negativo para la película, ya que pudiéndonos ofrecer a otro villano carismático y entretenido como los dos mencionados lineas arriba, le han otorgado a la película un personaje bastante plano y sin evolución, cosa que lo hace muy poco interesante para el espectador y le resta algo de atractivo a la película, pero en contraposición a ese punto negativo, es un villano que permite rematar su historia en el mismo film en la cual se expone, sin dejar cabos sueltos. Para los que seáis unos culos inquietos, recordad que esta película tiene escena post-créditos! Así que tendréis que esperar hasta el final para disfrutar de ella.

Vista en pase de prensa en Phenomena Experience, el 23 de mayo de 2017. Distribuida por Walt Disney Studio Motion Picture Spain.

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