El Vacío (2016): De la cordura a la locura en una partida… digo película

Fecha de estreno 8 de diciembre de 2017

Lo que tenía que ser una guardia rutinaria en una noche tranquila para el policía Danny Carter, se trunca cuando, desde la oscuridad del bosque, Danny se encuentra con un hombre ensangrentado, que aparece en medio de la carretera. Lo traslada al hospital más cercano, que debido a un incendio reciente no tiene muchos recursos y el personal mínimo en el turno de noche. Para colmo, las cosas se complican para el policía cuando se encuentra a una de las enfermeras matando sádicamente a un paciente… Después de arrancarse la piel de su propia cara. Cuando Danny va a su coche para pedir refuerzos, una misteriosa figura encapuchada lo ataca y decenas más salen de entre los árboles, rodeando el hospital y cercándolo, obligandolo a encerrarse dentro con los otros. Antes de que el turno de noche se acabe, todos ellos se enfrentarán a la pesadilla que se esconde dentro ese hospital medio en ruinas.

Conjuntando la estética del cine de terror moderno de los años 70 con los complejos efectos especiales que destacaron en las criaturas de los 80 y principios de los 90, los directores Kostanski y Gillespie crean con «El Vacío» una historia terrorífica con la tensión de pesadilla e intensa claustrofobia.

Esta película es más compleja de lo que la mayoría de espectadores pensaran en el primer visionado. Creo que hay dos maneras de ver esta película: la buena y la errónea.

En este caso concretamente, esperamos lo que cualquier película de terror nos ofrece: una historia con introducción, nudo y desenlace, que nos introduce en el contexto contándonos la situación, los problemas y los objetivos de los personajes. Luego los personajes investigan, logran descifrar los enigmas de la historia en cuestión y solucionan o no el tema hasta llegar al desenlace. En esta película, esperar este orden de acontecimientos es un gran ERROR.

Al estar basada esta historia en un fragmento de «Los Mitos de Chtulhu», es lógico para los que entiendan de este tema que la película no te introduzca en la historia, ya que esta historia sucede en un universo tan extenso y tan misterioso que los personajes se ven obligados a entrar en él sin saber nada sobre ello, la maldad que los amenaza es algo tan primitivo, ancestral y enigmático que atenta sobre su cordura, no hace falta argumentar el por qué de la locura que los embriaga. De todas formas, los personajes siguen avanzando porque no saben lo que está delante de ellos, y lo que está detrás, es peligroso y perturbador a partes iguales.

Creo que la forma «buena» de ver la película es imaginarla como si fuera una partida de rol. Los personajes principales tienen puntos de vida, puntos de cordura que irán perdiendo y ganando en el transcurso de la partida, cada personaje tendrá habilidades diferentes (persuasión, manejo de armas, inteligencia, sigilo…) con las que tendrán que jugar para sobrevivir hasta el amanecer.

Para mí, como jugadora de rol de «La Llamada de Cthulhu» la película me pareció un 10 en todo, pese a quién le pese. Es una película que, si la entiendes y la ves con un prisma diferente, te llena y la disfrutas a tope, y te deja con ganas de más.

Vista en pase de prensa en Soho House Barcelona, el 28 de noviembre de 2017. Distribuida por Segarra Films.

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