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Fecha de estreno 1 de diciembre de 2017
Steven es un célebre cirujano casado con Anna, una respetada oftalmóloga. La pareja vive feliz junto a sus dos hijos, Kim y Bob. El día que Steven entabla amistad con Martin, un niño de dieciséis años sin padre, decide ponerlo bajo su protección, y es en ese instante en que los acontecimientos dan un giro siniestro y es que, el neurólogo observa desesperado cómo sus hijos contraen una enfermedad que él es incapaz de explicar. Steven tendrá que escoger entonces entre cometer un impactante sacrificio o arriesgarse a perderlo todo.
Las buenas, muy buenas diría yo, películas tienen en común con las malas que son difíciles de recomendar.
Es el caso de este último trabajo del director Yorgos Lanthimos (Canino, Langosta) que lleva por título “El Sacrificio de un ciervo sagrado”.
Se trata de una película que crece conforme van pasando los minutos. Lanthimos saca el máximo partido a los actores mientras le va dando vueltas de tuerca a la trama del film.
La historia nos propone un dilema al qué Barry Keoghan (un joven adolescente), pone a un cardiólogo famoso (interpretado por Colín Farrell) para escoger que debe sacrificar para salvar a dos de sus tres cosas más queridas.
Destacable las actuaciones de Nicole Kidman como esposa del cardiólogo, Raffey Cassidy y Suny Suljic como hijos de esta pareja. Alicia Silverstone como madre de Barry Keoghan.
Y al final la pregunta existencial. De tus tres grandes pasiones, ¿cuál sacrificarías para conservar las otras dos?
Vista en pase de prensa en Sala Phenomena, el 22 de noviembre de 2017. Distribuida por Diamond Films.