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Ambientada en 1831 Virginia, unos treinta años antes del estallido de la Guerra de Secesión y basada en hechos reales, esta historia narra la vida de Nat Turner, un esclavo de una plantación de algodón. Instruido por sus amos desde pequeño, y más tarde predicador de los esclavos de su plantación, tendrá que ayudar a su amo Samuel Turner a ganar dinero utilizando su palabra (de Dios) para someter a esclavos rebeldes en otras haciendas.
A medida que se acerca la guerra de Secesión, los ciudadanos blancos se vuelven más despóticos y crueles con los esclavos, y durante su vida va siendo testigo de innumerables barbaridades -de las que, además, son víctimas él mismo y su familia-. En este punto de inflexión, Nat dirigirá un levantamiento contra la esclavitud con la esperanza de llevar a su pueblo a la libertad.
Dirigida y protagonizada por Nate Parker, «El Nacimiento de una Nación» intenta ser un retrato de las atrocidades de la esclavitud en Estados Unidos, lacra que, aun habiéndose abolido ya hace tanto tiempo, sigue estando presente actualmente en la manera de pensar de mucha gente (sobre todo en el sur de Estados Unidos), en comunidades que siguen en activo y que hacen de la xenofobia su pilar base.
Habiéndose hecho en estos últimos años películas sobre el mismo tema, «El Nacimiento de una Nación» tiene muchos ejemplos con los que compararse, y en ese sentido pierde mucho, ya que no posee la fuerza y el poder de transmisión que, pongamos un par de ejemplos diferentes entre sí, pero que en su día funcionaron bien (en mi opinión): «12 años de esclavitud» y «Django: desencadenado». Estas dos películas abordan el problema de la esclavitud en el sur de Estados Unidos con puntos de vista y cariz distintos, pero consiguen lo que le falta a esta película: que, con detalles y de forma subliminal sintamos el dolor y el sufrimiento de estas personas, que sintamos verdaderamente porque se rebelan en contra de lo establecido.
A mi, personalmente, las dos películas que he nombrado me hicieron revolverme, llorar de impotencia (soy muy sensible) pero «El Nacimiento de una Nación» no me produjo esa emoción que busco al ver este tipo de películas. Es más, me pareció que se pasaron tanto con el melodrama y lo macabro que sin quererlo insensibilizan al espectador ante las atrocidades que muestra el film. En conclusión, no ni la mejor pelicula ni la mejor historia para describir este fragmento de la historia americana.
Vista en pase de prensa en CINESA DIAGONAL 3D, el miércoles 8 de febrero de 2016. Distribuida por Twentieth Century Fox España.