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Fecha de estreno 16 de marzo de 2018
En un barrio libanés que esta en obras, Yasser (Kamel El Basha) el capataz, se enfrentará con Toni (Adel Karem) uno de los vecinos, llegando a insultarlo, lo que hace que estalle una pelea. Pero lo que parece una simple discusión llega a convertirse en un largo proceso judicial, haciendo que sea un conflicto a nivel nacional, entre cristianos y palestinos.
Dirigida por Ziad Doueiri, esta historia pretende ser un reflejo de la sociedad libanesa donde el enfrentamiento entre cristianos y palestinos es algo corriente. Jugando con el acto de que un insulto puede llegar a convertirse en todo una crisis de ámbito nacional cuando no se sabe o mejor dicho, cuando no se quiere admitir un error y por otro lado se utiliza para intentar vengarse de rencillas personales.
La historia tiene un buen ritmo y no lo pierde en ningún momento, haciendo que el espectador tenga ganas de ver cono avanza y hacia donde desembocara. Con escenas donde no es necesario dialogo alguno, pues el buen trabajo interpretativo deja clara las acciones y pensamientos de los personajes, con momentos que se quedan en la retina y que a pesar de lo crudo de la historia hace que lleguemos a esbozar una sonrisa.
Esta claro que el film es una crítica a la sociedad libanesa, a las discrepancias religiosas, a las raíces de las que cada uno procede y todo aquello que hace sea motivo de riñas e incluso guerras, que podrían evitarse si se supiera dialogar y en el momento preciso.
Como todo ello es algo muy presente en el actual mapa político mundial, bien sea en el Líbano, como en Corea, Estados Unidos, España y una larga lista de países, muchos serán los que trasladaran en su mente la historia a la región geográfica que les convenga y como servidor esta saturado de este tema, no voy a entrar en ello.
Por eso cuando empecé a visualizar hacía donde se dirigía la película decidí disfrutar de ella sin buscar comparativas con la realidad que ya se me tirará encima una vez abandone la sala.
El film además nos traslada a riñas más «caseras» como la que protagonizan los abogados, la que sufre cada personaje en su hogar y las consecuencias que ello acarrea, dando mayor significado al la formula acción-reacción-repercusión.
A pesar del tema que trata, deja un buen sabor de boca.
Una película muy recomendable, bien dirigida, con buenas interpretaciones, estupenda fotografía y momentos para recordar.
Vista en pase de prensa en Cine Verdi, el 9 de marzo de 2018. Distribuida por Sherlock Films.