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Fecha de estreno 4 de agosto de 2017
La Tierra es ahora un lugar desolado por el conflicto entre humanos y alienígenas. Plagada de edificios destruidos y donde los seres humanos luchan por sobrevivir, nos encontramos a Izabella, una de las muchas personas cuya vida cambió drásticamente con la llegada de los extraterrestres. La joven, que se ha adaptado completamente a su nueva vida en las calles, se unirá a Cade Yeager para hacer frente al peligroso desafío que tienen por delante. Son dos especies en guerra, una de carne y hueso, la otra de metal. Ante dos mundos que colisionan, solo uno de ellos podrá sobrevivir.
En “Transformers: El último caballero” saltan por los aires los mitos fundacionales de la saga Transformers y se redefine el significado de héroe. Los Humanos y los Transformers están en guerra, Optimus Prime ya no está. La clave para salvar nuestro futuro yace enterrada en los secretos del pasado, en la historia oculta de los Transformers en la Tierra. La responsabilidad de salvar nuestro mundo recae sobre los hombros de una insospechada alianza: Cade Yeager; Bumblebee; un Lord inglés y una Profesora de Oxford serán la clave para salvar lo que queda de nuestra especie.
Michael Bay nos trae esta caótica quinta entrega de una saga que, en mi opinión va en decadencia ya desde hace dos o tres películas. Desde la primera película de Transformers, protagonizada por Shia LaBeouf y Megan Fox, y de la cual tampoco extrajimos nada espectacular, nos han demostrado que siempre se puede hacer algo más malo que lo anterior.
Con Mark Wahlberg protagonizando esta entrega, como lo hizo en su predecesora (Transformers: La era de la extinción), nos ofrecen un guión compuesto por una amalgama de personajes, sucesos y conflictos mezclados entre sí de manera excepcionalmente funesta, cosa que hizo que no me enterara de la película hasta el punto de reírme de la situación, y que las 2 horas y 20 minutos se me hiciesen eternas. Por desgracia, si alguien me pidiese una palabra que definiera el film, esa palabra sería «ridícula». Ridículamente larga, ridículamente confusa, ridículamente imprecisa.
Para finalizar, quiero decir que a veces las productoras de películas no saben cuando es el mejor momento para parar. Esta saga hace tiempo que pide a gritos que la finalicen, y lo único que consiguen alargándola es hacer el ridículo.
Vista en pase de prensa en Phenomena Experience, el 12 de julio de 2017. Distribuida por Paramount Pictures Spain.